Un programa informático desarrollado en el MIT predice que experimentaremos el fin de nuestra civilización en 2040. Para el año 2020 habremos alcanzado el primer hito.
Originalmente, los investigadores del MIT desarrollaron el programa «World One» (Mundo Uno) en 1973 para modelar la sostenibilidad global – en cambio, predijo el fin del mundo. A diferencia de otras teorías sobre el fin de las civilizaciones y, en última instancia, del mundo, las predicciones que la computadora hizo en el decenio de 1970 han demostrado hasta ahora ser exactas y variadas en un grado alarmante.
El fin del mundo viene en forma de un colapso global
En ese momento «Mundo Uno» fue encargado por el Club de Roma. La asociación está formada por pensadores, ex jefes de gobierno, científicos y burócratas de las Naciones Unidas y se ha fijado el objetivo de «promover la comprensión de los desafíos mundiales a los que se enfrenta la humanidad y proponer soluciones mediante el análisis científico, la comunicación y la promoción».
2020 como primer hito de la catástrofe
El programa produjo el modelo requerido, pero en una forma que los científicos no esperaban. Predijo que la expansión de la población y la industria llevaría al mundo a un colapso global para 2040, amenazando a la humanidad con el fin del mundo tal como lo conocemos. El primer hito establecido por el algoritmo fue el año 2020, cuando se esperaba que el nivel de vida cayera abruptamente.
Según la rama australiana de ABC News, «alrededor de 2020 […] el estado del planeta se volverá muy crítico. Si no hacemos nada al respecto, la calidad de vida caerá a cero. La contaminación será tan grave que matará a la gente, lo que a su vez debilitará a la población. En esta fase, alrededor del 2040 al 2050, la vida civilizada tal como la conocemos en este planeta dejará de existir».
El reloj del día del juicio final está corriendo: ¿Todavía podemos detener el fin del mundo?
Según los expertos del Club de Roma, el colapso solo podría evitarse si naciones como los EE.UU. dejaran de engullir los recursos mundiales. El tiempo para la acción es corto: Ya hoy en día, nueve de cada diez personas en todo el mundo respiran aire contaminado, según los registros de datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Además, la OMS atribuye alrededor de siete millones de muertes anuales a la contaminación ambiental mundial.
«La soberanía de las naciones ya no es absoluta», dijo Alexander King, entonces líder del Club de Roma, al ABC. «Poco a poco, la soberanía está disminuyendo gradualmente. Esto también ocurrirá en las grandes naciones». Parag Khanna, experto de la CNN en globalización y geopolítica, explica nuestro futuro cercano – a menos que se busque un cambio de rumbo:
El fin del mundo es omnipresente
Que la gente se ocupe de su fin es normal y omnipresente. No solo el «Reloj del Día del Juicio Final» señala el fin del mundo entre las 2 y las 12, sino que la NASA también está trabajando en planes para prevenir el fin del mundo mediante la defensa de asteroides mortales. Experimentamos regularmente que esto será necesario en algún momento. Otros estudios reportan un calor mortal, que llevará al fin del mundo en 2050. Pero no solo eso. Incluso después del bicho que está dando que hablar, el cambio climático podría amenazar a miles de millones. Y si además sumamos las continuas catástrofes climáticas nos puede dar mucho que reflexionar.
