Han pasado casi 50 años desde que el físico húngaro-británico Dennis Gabor ganó el Premio Nobel por su invención del holograma, sin embargo, a pesar de las promesas de la ciencia ficción, el año 2020 tiene una clara falta de hologramas a nuestro alrededor.
La tecnología para crear y proyectar hologramas puede que no esté al nivel de Star Trek de recrear habitaciones enteras, pero ya lleva un tiempo preparada. Hace casi una década, investigadores del MIT demostraron que la televisión holográfica podría ser una realidad usando electrónica común. Utilizaron la cámara Xbox Kinect de Microsoft para producir una transmisión de vídeo holográfica de 15 fotogramas por segundo.
Usando la difracción, es posible grabar y reproducir una imagen 3D que tiene profundidad, paralaje y muchas otras propiedades del objeto original. Para producir un holograma, se requiere saber de qué manera la luz, principalmente los rayos láser, rebotan alrededor de un objeto y combinar la grabación con los rayos originales. El resultado final es una imagen virtual que se puede ver desde múltiples ángulos.
Ya se han utilizado pantallas holográficas para anuncios y comunicaciones a larga distancia. Un ejemplo famoso fue el del Príncipe Carlos hablando en la Cumbre Mundial sobre Energía del Futuro en Abu Dhabi a través de un holograma.
Durante la década de 2010, los hologramas se han utilizado en conferencias virtuales, pero algunos de los ejemplos más conocidos están en la música. En un movimiento controversial, tanto Michael Jackson como Tupac Shakur tuvieron su imagen reconstruida para una actuación virtual después de su muerte. Hablando de devolver a los muertos a la «vida», la personalidad de los reality shows Kim Kardashian recibió recientemente un holograma de su padre para su 40 cumpleaños.
Muchos en línea ridiculizaron tal regalo, pero su influencia en los medios sociales es significativa, por lo que los hologramas podrían empezar a aparecer en más lugares. La patente de la tecnología que creó el holograma de Tupac fue comprada por el empresario David Nussbaum, quien fundó el holograma PORTL. La tecnología fue utilizada para proyectar al fundador de Wikileaks, Julian Assange, fuera de la embajada ecuatoriana en la que permaneció durante años.
El enfoque de PORTL es una pantalla holográfica del tamaño de una cabina telefónica que puede crear una imagen holográfica usando una cámara normal con un fondo blanco. Esta pantalla cuesta 60.000 dólares, por lo que aún no está lista para su distribución masiva, pero tiene potencial.
Los investigadores también han pensado recientemente en un nuevo tipo de visualización delgada para los hologramas. En lugar de los casos voluminosos, éste es mucho más delgado, a menos de 10 centímetros. Ciertamente no es portátil todavía, pero es un paso adelante para la tecnología.
En un año en el que una pandemia mortal nos obligó a trasladar las reuniones y conferencias al mundo virtual, los hologramas pueden ser el siguiente gran paso para hacer este tipo de comunicaciones aún más interactivas.